Las lluvias en América Central dejan al menos 71 muertos

Un total de 71 muertos, más de 100.000 afectados y cientos de miles de personas en riesgo eran ayer el saldo de varios días de intensas lluvias sobre América Central, que es considerada por la ONU una de las regiones más afectadas por el cambio climático.
Un saldo de al menos 22 muertos en Guatemala, 7 en Nicaragua, 27 en El Salvador y 10 en Honduras delineaba una catástrofe que incluye además a empobrecidos campesinos que perdieron sus cosechas, carreteras internacionales cortadas por deslaves y poblados aislados por la caída de puentes.
“Tenemos que buscar cómo salvar vidas”, dijo en Managua, la vocera presidencial nicaraguense, Rosario Murillo, al anunciar la declaración del alerta amarilla en una docena de departamentos. Solamente en El Salvador “la población en riesgo por la emergencia asciende a 150.000 personas”, indicó ayer el presidente Mauricio Funes, basado en datos del Sistema de Protección Civil.
Al menos 27 personas murieron en El Salvador debido a las intensas lluvias que azotan el país desde hace una semana, según datos brindados este domingo por la Radio Nacional y otros medios locales de prensa.
Además de los 12 muertos reportados por Protección Civil en la noche del sábado, en la madrugada de este domingo se notificó la muerte por enterramiento de nueve personas, entre estas cuatro menores de edad.
DRAMÁTICO CUADRO
En las últimas cuatro décadas, los desastres naturales provocaron más de 50.000 muertos y decenas de miles de millones de dólares en pérdidas en la región, según un estudio de universidades europeas y latinoamericanas.
Un trabajo de la Comisión Económica para América Latina (Cepal) titulado “La economía del cambio climático” señala que las pérdidas económicas ocasionadas en América Central por el calentamiento global rondarán el 10% del PIB regional hacia el 2050.
Ayer en Guatemala, la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred) informó de que el balance se mantenía en 22 muertos y dos desaparecidos, mientras el número de afectados en todo el país superó los 94.000.
“Por el momento, no se han cuantificado las pérdidas, pero se sabe que en más de 12 municipios las siembras están con serios daños”, dijo Werner Marroquín, delegado del ministerio de Agricultura en el departamento de Chimaltenango, al diario Prensa Libre.En Honduras, el jefe de operaciones de la Comisión Permanente de Contingencias (Copeco), Johnny Cerrato, dijo que ayer se confirmó la muerte de diez personas, a pesar de que hasta el viernes solo se tenía confirmación de cuatro, según publicó el diario La Nación, de Costa Rica.
Un informe oficial de Copeco detalla, además, 7.862 personas afectadas, 463 evacuadas, 350 albergadas y 36 damnificadas, 381 viviendas dañadas y 25 destruidas, y tres puentes dañados y uno destruido.
En El Salvador, la Protección Civil y diferentes alcaldías continuaban evacuando personas de zonas anegadas en los departamentos de San Miguel y Usulután.
En Nicaragua, donde a los 6.000 afectados hay que sumarles daños a 250 km de carreteras y puentes, el presidente Daniel Ortega decretó alerta amarilla en 12 de los 17 departamentos y la alerta roja en sectores particularmente afectados.
En Panamá se reportaban inundaciones en la región de El Darién, fronteriza con Colombia, por el desborde de ríos, que afectaban en especial a poblados indígenas.
Pedido de ayuda
El Salvador hizo este domingo un llamado de ayuda a la comunidad internacional para atender la emergencia que afronta por las devastadoras lluvias, que han provocado 27 muertes, la evacuación de 13.874 personas y pérdidas económicas aún no cuantificadas.
“Ante las intensas lluvias que han llevado a la declaración del estado de emergencia nacional (…) el Gobierno de El Salvador hace un llamado de asistencia humanitaria a la comunidad internacional, a fin de atender las necesidades suscitadas en el marco de esta emergencia”, consigna un comunicado de la cancillería.