La Justicia ya investiga a Schoklender por lavado
El fiscal Pleé denunció a Oyarbide que empresas controladas por el ex apoderado de las Madres recibieron cheques del Gobierno y los cobraban en efectivo. Y que son dueñas de autos de lujo.
El fiscal antilavado Raúl Pleé denunció ante la Justicia al ex apoderado de las Madres de Plaza de Mayo Sergio Schoklender por haber derivado dinero de la Fundación a un grupo de empresas de su propiedad o que estaban bajo su control.
La denuncia de Pleé por lavado de dinero y fraude al Estado quedó radicada ante el juez federal Norberto Oyarbide y el fiscal Jorge Di Lello.
Mientras tanto, el Gobierno cambió de estrategia, salió a criticar a Schoklender y a respaldar a Hebe de Bonafini, q uien dijo que no “hay que perder tiempo en pelotudeces ” en alusión al escándalo desatado por su ex hombre de confianza. Desde el lado de la oposición, Elisa Carrió le pegó duro al Gobierno.
Fuentes judiciales revelaron a Clarín que Schoklender, además de pagarle dinero a la constructora Meldorek de su propiedad, derivó dinero a la empresa Antártica Argentina que es la que en el 2009 compró una casa quinta en José C. Paz con 19 habitaciones, piscina y una “boite”.
Entre el 2005 y este año, se estima que el gobierno nacional le dio a las Madres subsidios para su programa de construcción de viviendas por una cifra que va entre 150 y 300 millones de pesos. Como apoderado de la Fundación, Schoklender administró la mayoría de ese dinero.
Pleé recibió la denuncia el miércoles de parte del titular de la Unidad de Información (UFI), José Sbatella, quien depende del Gobierno. El fiscal trabajó toda la madrugada y, para evitar presiones, ayer mismo radicó la denuncia.
La presentación siguió la ruta del dinero de los cheques que el gobierno nacional y la ciudad de Buenos Aires le entregaron a la Fundación donde luego los endosaba Sergio Schoklender para cobrar, en varios casos, cifras cercanas al millón de pesos en efectivo. Otro que cobró fue su hermano Pablo, quien desde la semana pasada reemplazó a Sergio como apoderado de la Fundación.
Sergio dijo que esos retiros en efectivo eran para pagar “salarios a trabajadores de El Impenetrable, en el Chaco, que no tienen cuentas bancarias”. Sin embargo, el fiscal sospecha que la plata podría haber sido derivada al grupo de empresas que gira alrededor de Schoklender quien tiene -a nombre de sus empresas- casas, dos aviones, un yate y una Ferrari, entre otros autos lujosos.
Por ejemplo, en setiembre del 2009 Schoklender recibió un cheque de 1.308.013 pesos del Programa Federal de Construcción de Viviendas de la Nación y luego sacó 595.000 pesos en billetes de baja denominación.
Sbatella aceptó la explicación de Schoklender quien dijo que fueron para pagar sueldos de los 5.319 empleados de la Fundación. Para el fiscal podrían haber tenido “otro destino”.
Otro de los ejemplos sospechosos es el caso del presidente de Antártica y empleado de la Fundación, Alejandro Gotkin, quien firmó varios de los cheques investigados. Gotkin figura al frente de Setek S.A., Meldorek S.A., y Eagle Security & Investigation S.A. Este mismo nombre figura en las empresas Expedition S.A., Fun Pro S.R.L., Sabero Argentina, Amorin Systems, Sky Performance, Urban Constructions, Iturnet Systems, La Maiul, Partener Human Resources y Envío Express. Para el fiscal, Gotkin podría haber “canalizado fondos a través de su cuenta personal”. El diario La Nación mostró la escritura en que Schoklender figura como propietario del 90 por ciento de las acciones de Meldorek, la principal contratista de las Madres.
El fiscal destacó que Antártica Argentina nunca presentó un estado contable a la Inspección General de Justicia. “ Los movimientos en la cuenta de Antártica Argentina consistieron en su totalidad en cheques emitidos o endosados por la Fundación”, destacó. Pero como desde la cuenta de Antártica se sacaban la plata en efectivo o cheques de caja no se puede saber dónde terminó la plata.
Luego indagó en el patrimonio personal que Schoklender declaró como monotributista ante la AFIP. Allí dijo tener una moto Kawasaki y ser presidente de Regie Royale, Stylo Car, Habemus y otros empresas que Clarín reveló el miércoles.
Más adelante sumó al grupo de investigados al presidente de Meldorek y Monetización, Daniel Laurenti y los cheques por él librados. Schoklender había dicho que era “muy conocido” de Lauretis.
En su presentación Pleé pidió al juez Oyarbide que ordene una serie de medidas urgentes para que los investigados no destruyan pruebas.
Luego de entregar su denuncia ante Plée, con casi un año de atraso, el titular de la UIF recomendó por radio cómo seguir la investigación abierta por la denuncia de dos diputadas de la Coalición Cívica. Con precisión, en marzo del 2010 dos bancos habían presentado reportes de operaciones sospechosas (ROS) contra Schoklender. “El camino es seguir las operaciones entre empresas que tienen que aparecer justificadas y retiros y pagos que tienen que tener destino y eso es lo que corresponde a otros organismos del estado y a la justicia”. “El juez tiene que profundizar en ese camino y tiene que decidir las responsabilidades entre las acciones de la administración (de Schoklender) y la representación social que en este caso es la organización de las Madres”, sostuvo.
Lo que no dijo Sbatella es que en la causa de Oyarbide o en la que desde este lunes tiene su colega Marcelo Martínez de Giorgi también deberá investigar si los funcionarios del gobierno nacional, de la ciudad de Buenos Aires y las provincias controlaron los millones de pesos que administró Schoklender.