Apelaron la condena a prisión perpetua de Rivas por el crimen de su marido

Los defensores presentaron un escrito pidiendo la revisión de la sentencia. La mujer fue condenada el 29 de agosto a prisión perpetua por el crimen del ex basquetbolista paranaense. “Hubo prueba absurda e ilógicamente valorada”, dijeron.
Los abogados Rubén Pagliotto y Guillermo Vartorelli presentaron el jueves último la casación en el caso que tiene a Liliana Graciela Rivas condenada por el delito de homicidio doblemente agravado por alevosía y por el vínculo. La mujer recibió la pena de prisión perpetua por el crimen de su marido, Enzo Benedetich, aunque ahora el caso será remitido en revisión ante el Superior Tribunal de Justicia (STJ).
El 26 de septiembre de 2009 el ex basquetbolista paranaense de 44 años fue asesinado de cuatro balazos por la espalda mientras se encontraba con su esposa, en el automóvil Honda Fit de ambos, en la zona del parque costero de la capital provincial. El tribunal consideró que Rivas fue coautora del homicidio –por eso recibió pena de prisión perpetua– y que el autor material del crimen era el policía y albañil Rubén Armando Flores, quien fue hallado muerto un mes después del hecho.
La presentación efectuada por los abogados defensores de Rivas ante la Sala II de la Cámara del Crimen de Paraná incluye, no solo una disconformidad con la sentencia, sino también una crítica razonada respecto de los agravios al fallo, es decir, cómo el tribunal valoró la prueba ofrecida por las partes.
En ese sentido, Pagliotto y Vartorelli consideraron que “hubo prueba absurda e ilógicamente valorada, lo que permite decir que se hizo una valoración parcial de los testimonios” y apuntaron que “el tribunal arribó a conclusiones absurdas e ilógicas que atentan contra el sentido común y todo eso torna en arbitrariedades, tales como tomar en consideración los elementos de cargo y no los de descargo”.
Una vez que el tribunal realice los controles de formalidad, deberá elevar las actuaciones a la Sala Penal del STJ, que integran Daniel Carubia, Carlos Chiara Díaz y Claudia Mizawak, y luego de analizar la procedencia del recurso fijarán la fecha para la exposición oral de los argumentos de las partes.
La Sala II de la Cámara del Crimen de Paraná consideró que Rivas mintió deliberadamente con el objetivo de desviar la investigación y que las dos versiones que da sobre el hecho “son falaces” e inclusive se destacó en el fallo que Benedetich no era objeto “de poderosos sentimientos de venganza contra él que pudieran determinar la terrible decisión de su eliminación física por parte de terceros, a excepción de su esposa”.
Asimismo, en el fallo, suscripto por Marcela Badano y al que adhieren Raúl Herzovich y Marcela Davite de Acuña, se consignó que Benedetich y Rivas mantenían “una difícil relación, signada en especial por los celos y el control continuo de la mujer”.
El tribunal indicó además que Rivas dio dos versiones distintas sobre cómo ocurrió el hecho en el que fue asesinado su esposo y que si bien “no traen consigo una confesión, una inculpación y menos aún, una indicación o señalamiento de personas o cosas cuyo rastro pudiera seguirse, en orden a derivar prueba en su contra”, en ambos casos se considera que “están claramente dirigidas a ocultar lo realmente sucedido, y palmariamente, puede entonces colegirse, a encubrir el hecho, oscurecerlo, entorpecer su posible dilucidación” y, en ese marco, apuntó que “el móvil de este ocultamiento no puede ser otro que el de desvincularse del hecho que la tuvo como protagonista”.
En otro tramo de la sentencia, el tribunal apuntó que “Rivas llevó a su esposo, en el auto, engañado”, como también que “su aporte al hecho del que resultara muerto por la espalda fue indispensable, puesto que es lógico pensar que fue la impulsora de la celada” y que Benedetich “estaba absolutamente desprevenido y conocía a su agresor, y es por ello que resultó ejecutado de manera rápida y brutal, sin que presentara signos de defensa y que sin siquiera, pudiera atinar a bajarse del auto”.
El fallo de la Sala II de la Cámara del Crimen de Paraná no es categórico respecto de quién fue el homicida de Enzo Benedetich, sino que considera que “es altamente probable que fuera Flores”. Sobre ese punto, los abogados defensores de Rivas indicaron que “no se hallaron pruebas objetivas respecto de la responsabilidad de Flores; los análisis de huellas, pelos y el cotejo de pisadas no arrojaron resultado positivo, por lo que se basan en meros indicios”, del mismo modo que consideraron que “el flujo de llamadas y mensajes de texto no da certezas respecto de que fuera Flores el asesino”, indicaron los letrados.