Guillermo Barros Schelotto firmaría con Boca hasta diciembre de 2018
El Mellizo extenderá el vínculo con el Xeneize. La dirigencia que encabeza Daniel Angelici piensa renovarle por un año y medio. Quieren que sea el entrenador durante toda la Copa Libertadores de 2018.
¿A qué deben apuntar los equipos de Argentina? Sin dudas, a mantener la base. Eso debe ser la prioridad de cualquier equipo serio, que quiera pelear cosas importantes. No sirve de nada armar un equipo campeón para después vender a todas sus piezas. Es como tirar todo al tacho el trabajo de basura. Por eso, además de contratos buenos y largos para los futbolistas es necesario que la «cabeza» que conduce a todos, tenga las ideas claras.
Algo de esto es lo que quiere resguardar Boca. Por eso tiene como prioridad renovarle a Guillermo Barros Schelotto su contrato por un año y medio. Es decir, hasta diciembre de 2018. Daniel Angelici, el presidente xeneize, sabe que con el Mellizo en el banco se asegura el futuro en la Copa Libertadores. Edemás de ser un entrenador muy inteligente es un ganador. Y sabe lo que es jugar este tipo de torneos.
La Copa Libertadores es la obsesión del club. Hace 10 años que no la gana. La última vez fue de la mano de Juan Román Riquelme, el ídolo que hoy pega porque el club se olvidó de de ser copero.
Con Guillermo también renovaría todo su cuerpo técnico. Su hermano Gustavo, el Pata Pereyra como ayudante y el profe Javier Valdecantos, que hizo un muy buen trabajo con el plantel. Más allá de las lesiones, a Boca nunca se lo vio cansado o agotado. La manera de jugar del Mellizo es muy intensa y de mucha presión. Para eso es necesario un estado físico óptimo.
Además del cuerpo técnico, la dirigencia también piensa en los refuerzos. Saben que los que llegan hoy, sumados a la base que salió campeón, serán los protagonistas de la Libertadores en 2018. Por ahora sólo llegó Paolo Goltz, aunque también está muy cerca Cristian Espinoza. Ahora que se cayó Guido Pizarro, el técnico jugará fuerte para que llegue Néstor Ortigoza.
El nuevo Boca se está armando. Y la mejor noticia es que el Mellizo seguirá sentado en el banco.